Nicolás Grau, abordó la controversia por el acuerdo de reajuste del sector público, que limita los despidos de funcionarios a contrata y diferencia entre cargos de confianza y funcionarios de carrera. Destacó que la medida busca mayor estabilidad laboral y llamó a un debate racional que combine los derechos de los trabajadores con el buen funcionamiento del Estado.
Nicolás Grau, abordó la controversia por el acuerdo de reajuste del sector público, que limita los despidos de funcionarios a contrata y diferencia entre cargos de confianza y funcionarios de carrera. Destacó que la medida busca mayor estabilidad laboral y llamó a un debate racional que combine los derechos de los trabajadores con el buen funcionamiento del Estado.
En #CuatroCabezasGlobal, Kike Mujica y Consuelo Saavedra conversaron con el ministro de Hacienda, Nicolás Grau, sobre la controversia política surgida tras el acuerdo de reajuste al sector público alcanzado por el Gobierno con parte de la Mesa del Sector Público, acuerdo que la Agrupación Nacional de Empleados Fiscales (ANEF) no quiso firmar por considerarlo insuficiente.
El punto más controvertido del documento establece que, en el proyecto de ley de reajuste, se incluirá un impedimento para que los funcionarios a contrata del Estado —los cuales no son de planta— sean despedidos o se les cambien las condiciones laborales, pudiendo solo invocar “necesidades del servicio”.
La medida, que en la práctica endurece aún más las reglas, hace más dificultosos los despidos en el aparato público y ha sido calificada por la oposición como un intento de “amarre” previo al cambio de mando.
El ministro también destacó que el acuerdo introduce una distinción clara entre funcionarios de carrera y cargos de confianza política, como asesores y gabinetes, algo que —según él— no ha existido con suficiente claridad hasta ahora. Indicó que una parte importante de los trabajadores a contrata cumple funciones permanentes del Estado y no responde a adscripciones políticas.
“Lo que uno quiere para que el Estado funcione bien es que quienes son funcionarios de carrera no estén expuestos a arbitrariedades de autoridades políticas”, señaló.
Respecto a la tramitación legislativa y a las críticas surgidas desde distintos sectores, incluido el oficialismo, Grau evitó adelantar escenarios sobre los votos en el Congreso.
“Vamos a ingresar la propuesta acordada, como corresponde, y veremos en el Congreso si genera apoyo”, afirmó.
En ese contexto, el ministro llamó a elevar el nivel del debate público y a buscar consensos. “Creo que todos podemos contribuir a una conversación más racional sobre este tema, que busque un equilibrio entre las legítimas pretensiones de los trabajadores de tener buenas condiciones laborales y certeza sobre su vida laboral, y al mismo tiempo el buen funcionamiento del Estado”, sostuvo.